La preferida de las celebridades

Bettina Frúmboli es la make up artist más buscada por actrices, modelos y socialités. Apasionada y emprendedora, supo convertir lo que comenzó como un hobby en una carrera exitosa, y hacer realidad sus sueños.

Sabe exactamente cómo potenciar lo mejor de cada mujer: manejando brochas y pinceles como si fueran una varita mágica, Bettina Frúmboli es capaz de
transformar en princesa a Cenicienta. “El make up levanta el ánimo. Te maquillás bien y sos otra persona”, dice. Acostumbrada a embellecer aún más a las celebridades –a
quienes ayuda a destacar sus mejores rasgos o disimular imperfecciones–, se convirtió en la favorita de actrices y modelos.

¿Por qué te eligen?
Primero me eligieron porque les gustó cómo las maquillaba. Después vino la confianza, porque saben que yo no opino de lo que no me corresponde. Y, por supuesto, con el tiempo también surgió el afecto. Se generó un vínculo de cariño y respeto. No es que nos vemos los fines de semana ni nada, pero nos queremos mucho.

¿A todas las celebrities las maquillás vos personalmente?
No, no puedo estar en todos lados. En general, confían tanto en mí como en mi staff. Tengo un equipo muy formado y las celebridades las aceptan enseguida porque saben que es como si fuera yo.

¿Cuál es tu nuevo desafío?
Estuve trabajando mucho en un proyecto que me tiene entusiasmada y que acaba de concretarse, una publicación online especializada en belleza. Se llama Beauty File y está online desde la semana pasada (www.bettinafrumboli.com/magazine).

Tiene una chica de portada por mes, con producción, reportaje, sus tips de belleza y cuidado. La primera es Oriana Sabatini. Además, ahí cuento cómo recrear ese look,
con qué productos, y también incluye la participación de peinadores, una dermatóloga y una cosmiatra. En Latinoamérica aún no hay un sitio online sobre temas específicos
ligados a la belleza para que las mujeres puedan consultar. Y muchas me escribían, incluso desde México, Perú, España, preguntándome este tipo de cosas.
Así que me animé. Es como haber cumplido un sueño.

¿El de la revista propia?
Algo así. Desde chica siempre quise tener mi propia revista. Después me di cuenta de que era casi imposible, por la inversión que requiere, porque hay que saber de
precios del papel, imprenta, esas cosas… En cambio, así es más fácil. Y no me puedo equivocar, porque hablo de lo que sé.

El momento justo, ahora que la comunicación funciona desde ese tipo de plataformas.
Sí, desde hace tiempo me vienen contactando como beauty influencer para dar opiniones y realizar acciones. Creo que se está dando un cambio de paradigma en la comunicación y la publicidad. Ahora la gente busca en internet antes de dar el siguiente paso y necesitan confiar en palabras autorizadas. Y también es mi momento para llevar adelante este proyecto. Después de casi veinte años me siento capaz de hacerlo. Estoy poniendo todo lo que aprendí durante este tiempo, más la pasión y el compromiso de siempre.

¿Cómo elegís a tus chicas de tapa?
Son modelos o celebridades, pero con una historia para contar. Lo que quiero decir es que no me gustan las mujeres lindas y nada más. Me gustan lindas, talentosas,
apasionadas, que desde la imagen transmitan sensaciones. El gran desafío para mí es mostrarlas distintas, diferentes a lo que la gente está acostumbrada a
ver de ellas y, de la mano de eso, brindar contenido útil a la audiencia, generado por especialistas de todos los rubros relacionados con la belleza.

¿Vas a mostrar productos de distintas marcas?
Sí, he detectado que la gente quiere saber acerca de esto, me lo preguntan en las redes sociales. Voy a mostrar de todo, de todas las marcas, y para todos los presupuestos.

¿Cuáles son los productos clave de un buen maquillaje?
Primero la base: hay que elegir un tono similar al de la piel, para que el efecto sea natural.
El corrector de ojeras es otro producto que no puede fallar. Si la ojera es fácil de tapar, alcanza con un iluminador, si resulta difícil de disimular, hay que usar corrector. Y el resto depende de qué clase de maquillaje se quiera lograr. Para el día los labios rosas están muy bien y nunca pasan de moda, en cambio para la noche conviene pensar en algo de más impacto, como boca roja y mirada con brillo.

Fuente: Gabriela Grosso para Revista Hola! Argentina.